El problema consiste en que la mayoría de nosotros no escucha a Dios y por consiguiente no entendemos lo que nos dice. Como no entendemos lo que nos dice, a menudo no podemos hacer su Voluntad, y si escuchamos claramente su voz, no queremos hacer su voluntad, que tremendo problema verdad. 2 de Samuel Cap. 11-12
Autor: Pastor Pedro Chandía O. 26 de Enero 2014